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¿Cómo puedo conservar mi colchón?

Conservar el colchón ventilando la habitación

Un dormitorio saludable es aquel que se ventila con regularidad. Lo más recomendable es abrir la ventana por las mañanas al levantarse, tanto en verano como en invierno, para favorecer la renovación del aire. Esta práctica resulta beneficiosa desde cualquier punto de vista ya que, por ejemplo, evita la proliferación de virus de invierno, a la vez que mantiene a raya el riesgo de alergias relacionadas con el polvo y los ácaros.

En cuanto al colchón, lo mejor es esperar un poco antes de hacer la cama para que tu colchón pueda "respirar" y beneficiarse de esta ventilación.
En primavera, cuando la calefacción está apagada, puedes incluso dejar la ventana abierta todo el día para conseguir una ventilación máxima.
El simple hecho de abrir la ventana también reducirá el riesgo de humedad en el dormitorio, un dato a tener en cuenta. Una gran parte del mantenimiento del colchón pasa por el cuidado del dormitorio. Especialmente si compartes la cama con tu mascota.

Cuida de tu colchón con un buen aspirado

Si ventilar el dormitorio es importante, el cuidado del somier también lo es. El colchón se apoya en el somier y, por lo tanto, "hace equipo" con él para brindarte la mejor sujeción posible. Para cuidar tu somier, recuerda ventilarlo una vez al mes.

Retira el colchón y abre las ventanas. Una buena mano de aspiradora también ayudará a eliminar el polvo y a evitar que los ácaros proliferen. Lo mismo ocurre con el mantenimiento del colchón. Aspirar el colchón eliminará el polvo acumulado.

Cuidado del colchón: cambia las sábanas con frecuencia

El estado del colchón también depende del estado de las sábanas. Mantener una cama saludable también pasa por cambiar las sábanas cada 15 días aproximadamente, tanto si usas nórdico como si no.

Hay factores que pueden incidir en este plazo de 15 días, por ejemplo, si te duchas por la noche o por la mañana.

En cualquier caso, una cama que no incida en tu salud se mantiene cambiando las sábanas regularmente. Esto incluye la sábana bajera, que es la última barrera, junto con la funda, para la protección de tu colchón. Lo que nos lleva al siguiente punto...

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